CAÑÓN DE RÍO LOBOS (SORIA)

 

CAÑÓN DE RÍO LOBOS DESDE UCERO (SORIA)

Hay un Parque Natural en Castilla y León que no se puede dejar de visitar, por su geología, por su naturaleza, por sus paisajes, por sus misterios, estamos hablando del Cañón de Río Lobos. Fue uno de los primeros parajes declarados “Parque Natural” en la Comunidad Autónoma, en 1985, siendo además Zona de Especial Protección de las Aves (ZEPA) y Zona de Especial Conservación de la Red Natura 2000. Y si a ello le sumamos la ermita de San Bartolomé, con su magia y misterio, ya tenemos el paquete completo para visitar este espectacular paraje.  Aunque el recorrido del Cañón tiene 25 Km. desde Hontoria del Pinar (Burgos) hasta Ucero (Soria) nosotros lo vamos a realizar desde la localidad soriana hasta la ermita de San Bartolomé.  Si nos decantamos por este recorrido es por la época del año en la que estamos, verano, ya que en esta parte es donde el río tiene caudal. 

                                                      Recorrido desde Ucero a la Ermita de San Bartolomé

Nada mejor que visitar primero  la Casa del Parque para estar bien informado de todo lo que vamos a ver en esta excursión.

                                                           Casa del Parque

La Casa se sitúa a las afueras de Ucero en dirección a la entrada al Parque. Es un antiguo caserón, utilizado como molino en otros tiempos, junto al río Ucero. En él podemos ver, en una visita guiada, la morfología del cañón, su vida silvestre, su fauna y la historia del parque. Muy interesante es el audiovisual en la segunda planta.

La Casa del Parque nos enseña el hábitat del Cañón

Junto a la Casa una pequeña piscifactoría donde los más pequeños pueden disfrutar de la “pesca” de las truchas.

                                                            Piscifactoría

Desde aquí un sendero nos conduce hasta la entrada al cañón, aunque también lo podemos realizar en coche y aparcar en los sitios habilitados. El coste del aparcamiento es de 4 € por vehículo e incluye la entrada a la Casa del Parque para 5 personas. Nosotros hemos dejado el coche junto al restaurante de la entrada. El sendero discurre junto al río. Lo primero en que te fijas es en los acantilados rocosos que rodean el cañón, el vuelo de algunos buitres y la vegetación de sabinas que bordea el paisaje.

                                                 Las sabinas son predominantes en el Cañón

                         Las típicas bermas en los cantiles son cuevas hundidas

                        Los senderos están bien acondicionados para todos los públicos

                            Los derrubios de las laderas son producidos por el deshielo

Bajando la vista al suelo el río es el protagonista. La vegetación es diferente que en las alturas, aquí vemos matorrales de aulagas, endrinos, tomillo, nenúfares sobre el agua, lirios de agua  y todo dentro de un bosque de ribera junto a pino laricio y enebros. Cada vuelta del sendero te descubre un rincón nuevo, mientras el río discurre entre el valle y otras veces pegado a la roca. 

La vegetación junto al río es espectacular

El sendero también discurre entre pinos laricios

Llegamos a la ermita de San Bartolomé. Enigmática, misteriosa, mágica. Hoy en día aún se discute su origen, para muchos es templario. Su construcción se fija a finales del siglo XII o principios del XIII. Es de estilo románico con los inicios del gótico. El origen templario se fundamenta en vincularla a San Juan de Otero, lugar de la Orden de los Caballeros del Temple, pero según los estudiosos no es correcta esta afirmación. Lo cierto es que la ermita está llena de leyendas y se tiene por un lugar telúrico.

No son pocos en que creen en la magia del lugar

Ermita de San Bartolomé

Se han plantado olmos nuevos que resisten la grafiosis

Ábside de la ermita

Hastial con el símbolo del parque

 La edificación es de cruz latina, (el interior no lo pudimos visitar ya que solo se abre el 24 de agosto con motivo de una romería). En el exterior sobresalen dos  rosetones en forma de estrella de cinco puntas que iluminan su interior y que se han convertido en el símbolo del Parque. También dicen que en los soltícios  la luz que entra por un rosetón se proyecta sobre una losa del suelo que tiene grabado el mismo símbolo. La portada protogótica, que mira al sur, está compuesta por una arcada muy apuntada con seis arquivoltas contiene una sobria decoración. Al lado de la puerta los capiteles muy decorados adornan la portada. Rodean las fachadas diferentes canecillos con imágenes misteriosas y de difícil interpretación, cabezas de mujeres, un tonel, la letra H, números, etc.

Portada y detalle de los capiteles

Canecillos encima de la portada

Buscando el misterio de esta ermita hay quien sostiene que realizando sobre el mapa de la Península Ibérica, una línea recta desde el cabo de Creus hasta Finisterre y de norte a sur, cruzando por la ermita, la península se divide en dos mitades y se formaría la cruz templaria. Lo que sí que es cierto que al visitante le impresiona la situación de la ermita y la ubicación junto a la gran cueva. Un gran punto de observación es lo que se ha llamado el “ojo del Diablo”, una “ventana” rocosa frente a la ermita y al que se accede por un sendero. Las vistas son espectaculares.

                                                        El cañón desde el ojo del diablo

No podéis dejar de visitar éste Parque Natural, tus sentidos te lo agradecerán.

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