TOLBAÑOS DE ARRIBA Y ABAJO
EN EL VALLE DE VALDELAGUNA (BURGOS)
Nos
encontramos en el Valle de Valdelaguna, a los pies de las cumbres de la Sierra
de La Demanda, y a muchos metros de altitud, ya que Tolbaños de Arriba es la
población más alta de la provincia de Burgos. Pueblos dedicados a la ganadería
lanar y la trashumancia en los tiempos pasados
que llegaron a contar con 10.000 cabezas durante el siglo XVIII en el Valle de Valdelaguna,
Todo ello controlado por la desaparecido, en 1836, Concejo de La Mesta. Hoy en
día el poco ganado ovino es churro y la economía ha cambiado al igual que el
número de habitantes. De los más de 350 habitantes entre los dos pueblos a
principios del siglo XX se ha pasado a no llegar a 50 entre los dos. Sin servicios esenciales y sin empresas que
den trabajo a los jóvenes el futuro es negro para el mundo rural.
Encontramos
el nombre de los pueblos escrito por primera vez el uno de enero de
1044 en el cartulario del monasterio de
San Pedro de Arlanza, como: “Tolvanio et alio Tolvanios”, según parece de la
raíz “tollo” o charco y baños. En sus términos se han catalogado yacimientos
altomedievales.
Para
ir a los Tolbaños hemos cogido la carretera que sale de Salas de los Infantes y
se dirige a Nájera, en tierras riojana. Al llegar a Valdepez nos hemos desviado
por la carretera que se adentra en el Valle de Valdelaguna hasta llegar a Huerta
de Abajo y seguir por la carretera BU-V-8211 hasta Tolbaños de abajo, nuestro primer
destino. El camino va paralelo a río Tejero, por carretera estrecha y sinuosa,
pero que te deleita con el paisaje. Aquí se ven grandes bosques de robles,
hayas y pinos, a la par que una abundante fauna, como ciervos y jabalís entre
otros.
En
Tolbaños de Abajo puede encontrarse una de las dehesas mejor conservadas de la
península ibérica, con ejemplares de roble rebollo (quercus pyrenaica) y de
roble albar (quercus petraea), estos últimos se acercan a los 700 años de
longevidad. También se encuentran hermosos ejemplares de acebo.
Tolbaños de Abajo es el pueblo
más pequeño de los dos. Aún mantiene las calles su antigua estructura y se
mantienen en pie sus viejas casas
construidas con piedra arenisca de la zona. Una construcción que se ha
restaurado hace unos años es el molino que está situado a un kilómetro del casco urbano
aproximadamente pero merece la pena visitarlo especialmente por sus vistas. Es
una estructura sencilla que está en desuso. Desde allí se pueden observar unas
vistas magníficas del valle.
Entre
sus edificaciones, un tanto alejada,
sobresale su iglesia, dedicada a San Quirico y Santa Julita, de origen
románico y con varias trasformaciones. Es de una sola nave y capilla y ábside es rectangular con aspillera. La
portada es románica con dos arquivoltas lisas con fustes y capiteles y remate de guardapolvos
de bolas y rosetas. Destaca la torre exenta que es una de las peculiaridades de
esta iglesia ya que no es habitual ni en la comarca ni en España. Es cuadrada, esbelta, de piedra sillar, con
dos huecos y dos campanas. En su interior encontramos una pila
románica, con cenefa vegetal en
relieve y gallones, con pie cilíndrico y
base circular; El retablo mayor es neoclásico.
En otro, barroco, hay un San Juan
Bautista y un San Juan Evangelista góticos. Hay también otro apóstol gótico.
Otro
edificio religioso es la ermita de San Millán: Es un pequeño templo de una sola
nave, planta de salón, muros de sillarejo y cadenas de sillares en los ángulos.
En el hastial se abre un arco de medio punto. Esta pequeña ermita se puede
datar de finales de siglo XVI o principios de siglo XVII.
Comparte otra ermita, la de la Virgen de la Vega con su pueblo vecino de Arriba, Huerta de Abajo y Huerta de Arriba, donde se organiza una romería a primeros de septiembre, en lo que se llama “Mancomunidad de Patria”.
Nos marchamos a Tolbaños de Arriba. No queda muy y el paisaje que contemplamos en el trayecto es espectacular. El pueblo es más grande que el anterior y está dividido por la carretera y el río que lo atraviesa. Sus calles son estrechas e invitan a perderse por ellas. Su iglesia está dedicada a San Juan Bautista y es renacentista, de una nave con pilastrones, arcos y nervios de piedra. Su ábside es rectangular con contrafuertes. La portada es clásica, de medio punto, con dovelas molduradas, bajo pórtico cerrado con gran arco de medio punto con impostas decoradas. La torre es cuadrada, incrustada en la mitad de la iglesia, con un gran arco apuntado y rematada en bolas, con cuatro huecos y dos campanas. A los pies, la cimentación se levanta hasta tomar la altura del suelo. En su interior hay una pila gótica con bordes moldurados, y gallones pequeños y pie cilíndrico con molduras; y el retablo mayor es rococó, con un San Juan Bautista del siglo XVI. Hay una Virgen sedente con Niño del siglo XIV. También hay una ermita dedicada a Nuestra Señora del Salterio y restos de otras dos
En
Tolbaños se pueden visitar las Lagunas de Ahedillo, lagunas glaciares en estado natural, y el
desfiladero cercano de Las Calderas,
impresionante garganta escavada en la roca por el agua.
Un
acontecimiento que no te puedes perder si te gusta la música es Demandafolk , un festival de música tradicional gratuito que
se celebra anualmente en Tolbaños de Arriba en el mes de agosto. La primera
edición tuvo lugar en 2007, y desde entonces se ha realizado anualmente, con un
gran éxito de crítica y público. En octubre de 2013 se le concedió el primer
premio de medioambiente de Burgos al ser un festival de música tradicional de
bajo impacto ambiental,
Dos
pueblos que no defraudan en su visita y con muchas alternativas para pasar días
de disfrute de la naturaleza.
PARA VER EL MAPA PINCHA AQUÍ: Tolbaños
